La Excavación en Proyecto Dino

Las distintas campañas al lugar de trabajo fueron variadas y cada una tuvo sus particularidades, la convivencia de los distintos grupos fue enriquecedora y permitió entablar nuevas amistades con gente de distintos lugares del país y del extranjero.

Desde la primera campaña realizada con pocos recursos, usted podrá observar como fue evolucionando para llegar a la actualidad con mejoras sustanciales. Durante 2003 y 2004 la infraestructura y el área de la excavación fueron aumentando. Los trabajos de campo y la vida en el campamento son parte de una misma cosa, que no pueden separarse a diferencia de cualquier trabajo en la ciudad.




El hallazgo de restos fósiles de dinosaurios comienza con la exploración en rocas de la Era Mesozoica, en Lago Barreales corresponden al período Cretácico y tienen una antigüedad de 90 millones de años. Una vez halladas las primeras evidencias, se procede a limpiar la superficie y delimitar los bordes del fósil. Posteriormente, se excava a su alrededor hasta formar un hongo. De esta manera, la roca hace de contención parcial del fósil.

Luego se construye el denominado Bochón, que se emplea para facilitar el traslado de los fósiles hacia el laboratorio, y evitar que se quiebren. El Bochón se realiza cubriendo el fósil con papel húmedo, trapos embebidos en yeso y refuerzo de hierros que se cubren nuevamente con yeso. Posteriormente, se procede a excavar profundizando los laterales del Bochón, de esta manera, se construye una especie de hongo el cual luego se corta en su base y se da vuelta para su transporte. El transporte del bochón es otro problema para el paleontólogo, porque puede pesar desde pocos kilos hasta varias toneladas. En el laboratorio, se procede a la limpieza más minuciosa del fósil, tratándolo de separar de la roca. Este trabajo se realiza con pequeñas herramientas, como tornos neumáticos que permiten realizar el trabaj o con mayor precisión. Una vez limpio este material puede comenzar a ser estudiado, y así se determinará a que especie pertenece. Si el fósil no es conocido, hay que asignarle un nombre al mismo y comunicarle a toda la comunidad científica paleontológica sobre el nuevo hallazgo.

Este proceso lleva mucho tiempo de dedicación, paciencia y aprendizaje. La materia prima, el fósil, se obtiene de la roca y para rescatar este patrimonio de la Nación se debe sortear toda una serie de inconvenientes que van desde la falta de fondos hasta las inclemencias del tiempo. Se debe además tener mucho respeto por el medio ambiente. Este trabajo conlleva el esfuerzo de paleontólogos y técnicos, que dedican su vida entera al estudio del pasado del planeta en que vivimos.

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